El virus que nos secuestró es mi nuevo proyecto. Una vuelta a la infancia de coleccionables que se hacían eternos pero que daban emoción a esa espera en el quiosco hasta que la nueva entrega llegara. ¿Os acordáis?
Este año tan raro y tan caótico había que contarlo y con Apericuentos casi recién salido del horno no me apetecía meterme tan pronto en todo lo que conlleva crear un libro (y no me refiero a la parte de escribirlo) Pero al mismo tiempo quería publicar todo lo que había escrito en forma de ficción sobre los primeros 90 días de encierro,así que al final Gerard me dio esta idea para poder tener las dos cosas (como los genios de las lámparas que cumplen deseos)
De pequeña coleccionaba todos los albumes de cromos de Panini y me quedaba embobada con los anuncios de las colecciones de Planeta Agostini, sobre todo si eran de libros o de piedras mágicas. Esa emoción de empezar a coleccionar algo y esperar cada semana en el quiosco a que llegara la nueva entrega se ha perdido con el tiempo y la inmediatez de esta vida que a veces va tan deprisa.
Con lo impaciente que soy yo y cómo echo de menos esa espera, ¡ironías de la vida! Y con esa idea de tener algo nuevo que esperar cada semana, empiezo esta entrega que se llama El virus que nos secuestró. Diario de un confinamiento, y que no es más que un diario semanal sobre las vivencias de Lilith durante sus primeros 90 días desde que saltó el estado de emergencia por culpa del COVID.
Sus locuras, sus pensamientos, su día a día que como ella misma dice prefiere vender al mundo antes que mantenerlo en un diario secreto y que alguien se lo lea.
Podéis descargar la primera semana de este diario justo aquí Diario de un confinamiento Si después queréis saber más, habrá que esperar una semana más para poder comprar la siguiente entrega por 0,95 euros. Como cuando éramos pequeñas, pero sin tener que salir de casa. Y mucho más barato que comprar el HOLA o el 10 Minutos.