Empezó el año y vino con la agenda del 2020. Supongo que tienes que ser un enamorado de la papelería para saber lo que se siente cuando una nueva agenda llega a tu vida. Es como estrenar un libro nuevo pero ocurre solo una vez al año.
Desde tiempos inmemorables
Este amor por la papelería y los libros viene desde que tengo uso de razón. La llegada de un nuevo curso escolar era la excusa perfecta para estrenar bolígrafos, estuches y libretas y creo recordar que fue en Secundaria cuando las agendas se convirtieron en las protagonistas de estas adquisiciones.
«Recuerdo recorrer todas las papelerías y las secciones de Continente hasta encontrar la más adecuada»
Por aquel entonces, viviendo en un pueblo pequeño, no eran muchas las opciones que había entre las pocas papelerías locales. ¡Quién iba a imaginar entonces lo que traería la llegada del Corte Inglés y las compras online! Aún así, recuerdo recorrer todas las papelerías y las secciones de Continente hasta encontrar la más adecuada.
Si no estáis en este mundo, quizás os cuente entender a qué viene tanta historia con un cuaderno con las fechas marcadas, pero en esa época las agendas eran un evento social en sí mismas, una mezcla entre diario secreto y cuaderno de dibujo que compartías con las elegidas para mandar mensajes, dejar comentarios o pegar fotografías. Aún conservo algunas y ¡son un auténtico tesoro!
Mis agendas
Con el paso del tiempo esa magia se fue perdiendo, para pasar a convertirse en algo más privado y más personal. Ahora es importante el uso que le vas a dar, dónde la vas a llevar o si combina con tu estilo, porque no deja de ser un complemento más como tu bolso o tu móvil.
Igual que la Navidad llega cada vez más pronto con los escaparates y los turrones en las tiendas, el proceso de adquirir una nueva agenda comienza más o menos en el mes de julio o agosto para las agendas escolares. Hace mucho que dejé esas agendas, pero te dan una idea de los diseños que vas a encontrar para las anuales, además con lo ansiosa que soy antes de Diciembre ya tengo la mía, con lo que me toca esperar mínimo un mes para poder estrenarla.
Para mí fue Mr. Wonderful quién empezó con esta locura por las agendas diferentes, y las tuve durante un par de años, lo malo es que después empezaron a imitarlas y a mí el buen rollismo se me pasó un poco la verdad. De ahí pasé a otras con mensajes más sarcásticos como los de Moderna de Pueblo o Pedrita Parker y también algunas más artísticas como las de la ilustradora Sara Herranz.
«Cuando vine a Londres tuve que dividir mi amor por el producto nacional y mi nuevo hogar»
Cuando llegué a Londres y descubrí Paperchase mi cabeza quería explotar con tantas plantas sólo de agendas y libretas de todos los colores y tamaños, así que empecé a comprar dos, una para el trabajo y otra para mis cosas personales, y así dividir mi amor por el producto nacional y mi nuevo hogar.
La agenda 2020
Y ya por fín llegó enero, y después de mes y medio guardando mis agendas puedo estrenarlas. La agenda 2020 de la oficina este año es de La Vecina Rubia, porque esta gente necesitan saber lo que es el brillibrilli y el color rosa deslumbrante. Y en lo personal, estuve entre Charuca y una dedicada a los libros, pero la de Charuca no la encontré en la tienda, así que queda pendiente para el 2021.
¡Bienvenidas a las dos! Nos esperan doce meses por delante y muchas páginas por escribir.
Si algo bueno tenían los comienzos de curso, eran los cuadernos, lápices y libros nuevos. Llegaba a casa y me encantaba sacarlos de su envoltorio y mirarlos como a un tesoro. En Reyes nunca faltaba la caja de lápices de colores de Alpino y ya más tarde llegó mi primer bolígrafo de muchos colores. Eso fue la bomba para mí. Jajaja se nota la edad.
Los Alpino eran mis lápices favoritos. Y aunque ya no haya curso nuevo, siempre hay alguna excusa para estrenar boli o cuaderno 😊